Enfrentar algas sin dañar playas

Es indudable que la proliferación de algas en las playas de República Dominicana es un problema que afecta al turismo, y que por lo tanto pone en juego los ingresos obtenidos a través de este sector.

Por esta razón se hace necesario prestar mucha atención a esta problemática que desde hace meses llega, no solo a las aguas dominicanas, sino también a toda la región del Caribe.

Es importante que las autoridades, y los mismos ciudadanos de ser posible, tomen todas las medidas necesarias para reducir la propagación del sargazo y para que nuestras playas luzcan las más limpias y nuestros destinos los más acogedores posibles para que continuemos dando la inolvidable estadía que estamos acostumbrados ofrecer a nuestros turistas.

Sin embargo, la recogida de estas plantas se debe llevar a cabo bajo medidas apropiadas, y con los instrumentos adecuados, para evitar que las playas y balnearios del país resulten afectados, como ha denunciado la viceministra de Recursos Costeros y Marinos del Ministerio de Medio Ambiente, Idalia Acevedo.

La funcionaria dijo que en Boca Chica, por ejemplo, se han utilizado palas mecánicas para recoger las plantas marinas, una manera incorrecta de realizar este trabajo según ha manifestado el biólogo William Gutiérrez.

Es comprensible que las autoridades de los destinos, así como los hoteleros, estén preocupados por la situación, debido a que las algas han inundado muchas de las playas de Dominicana, algo que resulta incómodo para los visitantes que vienen a disfrutar de sol, playa y arena, pero tampoco debemos resolver un problema y originar otro, dañando nuestras bellezas naturales.

Trabajemos juntos para buscar medidas adecuadas y resolver el problema de las algas en nuestras playas, pero guiándonos de medidas que ayuden a proteger el medioambiente.