Economistas plantean Gobierno no perjudicará turismo con pacto fiscal

El tema del pacto fiscal ha vuelto al tapete, creando preocupación en el sector empresarial que recibe exoneraciones por parte del Estado. Sin embargo para el turismo, renglón que en el primer trimestre de este año aportó RD$2,161,792,332, distribuidos en impuestos de salida y entrada, derechos aeroportuarios y tarjetas de turistas, según cifras de la Tesorería Nacional, no habría una amenaza con dicho pacto por su gran valor como fuente generadora de divisas, según coinciden economistas consultados por arecoa.com.

El plan del gobierno es eliminar las exenciones que les facilita a algunos sectores con el objetivo de equilibrar los ingresos y egresos del Estado para crear un balance e invertirlo en otras áreas o quizás, hasta saldar la deuda pública.

Con la exención del Impuesto sobre la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS), el de Patrimonio, el de la Renta u otros, la industria turística recibe aproximadamente 5,801 millones de pesos en exenciones fiscales, es decir el 2.73% de los 212 mil 378.9 millones que representan para el gobierno todas las exoneraciones.

Para el economista y catedrático de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Antonio Ciriaco Cruz, no sería un dolor de cabeza que el turismo deje de recibir exoneraciones, pues para su buena suerte por el desempeño que ha tenido en la economía dominicana, es un “sector consolidado y maduro”.

Y es que las autoridades están conscientes de que el turismo genera divisas, mucho mayor que las exenciones que recibe. Sin embargo, otro experto en el área de la economía, como Luis Núñez, piensa que el gobierno quizás reduzca las exoneraciones para que nazca en algunos aspectos la privatización de la industria debido al alto nivel de sus incentivos.

Ambos especialistas cierran posibles afecciones contra el sector turístico porque a su entender, aceptar por completo un pacto fiscal podría perjudicar la meta de los 10 millones de turistas para 2022, razón por la que consideran que el Estado no se arriesgará con su gallina de los huevos de oro, pues no representa una carga ante los grandes aportes que le genera.