El turismo uruguayo lucha por salir a flote ante crisis aérea y control cambiario argentino

Luego de haber vivido la dura realidad del cierre de la línea aérea bandera uruguaya Pluna, el país austral ha tenido que afrontar serias amenazas a la industria turística con lo que podría considerarse una extensión y puntillazo en la crisis aérea con la decisión de la aerolínea española Iberia de suspender sus vuelos hacia el Aeropuerto Internacional de Carrasco en Montevideo, única conexión directa para viajar a Europa, además de el estricto control cambiario en Argentina, lo que ha llevado a crear formulas para atraer al turista argentino y que pueda pagar con pesos argentinos.

Tan solo a solo cinco meses del cierre oficial de Pluna, ya el Aeropuerto Internacional de Carrasco ha registrado una disminución de 6.500 lo que ha repercutido en la baja de más de 377.000 pasajeros en comparación al período de julio-octubre de 2011, de acuerdo con el diario uruguayo El País.

Esta disminución representa una caída del 62% en el número de vuelos y una disminución del 50% de los pasajes vendidos, según estadísticas oficiales de la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia). Entre julio y octubre del año pasado, hubo 10.449 vuelos; para el mismo período de este año, la cantidad se redujo a 3.937.

El cese de operaciones de Pluna, principal aerolínea uruguaya, el 5 de julio pasado por las crecientes cifras en rojo también impactó en los pasajeros: 750.004 pasaron a 372.134. «Estamos sufriendo el primer impacto.

El gobierno de José Mujica ha hecho una serie de acciones para poder recuperarse de la crisis aérea, ente las cuales se cuenta las negociaciones para la creación de una aerolínea con una inversión inicial de US$50 millones, que podría llamarse ‘Alas Sudamericanas’  y cubriría el vacío dejado por Pluna, incluso absorbería también a los trabajadores de la empresa liquidada.

Mientras que para afrontar el descenso de la llegada de turistas argentinos a Uruguay, el gobierno ha tomado algunas medidas como las de aumentar los beneficios de la devolución de los impuestos a las compras turísticas y se está negociando crear un modelo cambiario que incentive al turista argentino a viajar a Uruguay.