Collado y Francisco Javier, dos estrategas con métodos dispares

David Collado y Francisco Javier García tienen en común que ambos son dos reconocidos estrategas en marketing electoral, dos expertos en captar votos. Pero ahí acaban la convergencia entre el actual ministro de Turismo y su antecesor en el Mitur.

Incluso son divergentes en la manera de enfocar las campañas, en luchar por el voto. David Collado es mucho más joven que Francisco Javier García y eso se nota en la táctica y en los usos de las herramientas políticas: el ministro DC es más moderno y el exministro FJG más clásico.

Collado y Francisco Javier son muy dispares en prácticamente todo lo que concierne a la política y al mundo que la rodea. Un entorno que se centra básicamente en el mercadeo electoral. Y aquí uno y otro usan métodos bien distintos para conseguir sus objetivos.

A David Collado le seducen las redes sociales, donde es muy activo (diríase sin exagerar que hiperactivo). De su lado, Francisco Javier García se centra mucho más en los planeamientos tradicionales: baños de masas, mensajes con trasfondo, seguimientos de encuestas…

Las puestas en escenas de las actividades de Collado en ferias, presentaciones, picazos y reuniones ponen de manifiesto su desenvoltura mediática. Sabe sacarle jugo a todas sus participaciones, tal como demostró con creces en la pasada Fitur con un despliegue mediático y una escenografía hasta ahora nunca vista.

El exministro ha demostrado a lo largo de los años que es un experto en campañas presidenciales, un estratega de éxito porque consiguió varios triunfos con Leonel y Danilo. El ministro vigente está demostrando que a su manera también domina con acierto el mercadeo electoral, y no sólo el de las redes sociales.

Francisco Javier es un veterano de la política que ha hecho de la paciencia virtud. Como buen experto y con un bagaje de muchos años en ministerios y puestos de relevancia sabe estar en el sitio adecuado en todo momento. No den por muerto al hoy jefe de campaña de las presidenciales del PLD.

Los observadores de la política dominicana y de nuestro mundo turístico van a disfrutar con las pericias que lleven a cabo durante estos meses el presente ministro de Turismo y su hábil antecesor.